La realidad es que cada año se venden unos 480 000 millones de botellas de plástico, lo que supone 1300 millones de botellas al día.
Según los estudios recientes, esta cifra, que no para de aumentar, va camino de alcanzar los 583 000 millones hasta 2021. (fuente: Euromonitor International)
Pero lo que resulta todavía más alarmante es que solo se recicle menos del 14 % de todas estas botellas de plástico.
La empresa Coca-Cola es responsable por sí sola de la fabricación de 120 000 millones de botellas al año.
Según un informe de la fundación Ellen McArthur, se prevé que en el año 2050 los océanos contendrán más plásticos que peces.
Por lo tanto, esta catástrofe se ha convertido en la principal preocupación de los gobiernos de todo el mundo, como evidencian los sistemas de depósito que recientemente se han comenzado a implantar. Actualmente, se cifra en más de 130 millones de personas el número de beneficiarios de este tipo de depósitos para el reciclaje de Europa. Por ejemplo, en Noruega se realiza un depósito de 25 céntimos de euro por botella.
Maurice Amsellem, empresario francoisraelí y presidente y director ejecutivo de ECOAMS PLANET, una empresa que desarrolla productos que dan respuesta a los desafíos que plantea el desarrollo sostenible, ha creado Bakbuk™, una solución sencilla y eficaz para el reciclaje de botellas de plástico cuya patente mundial ha sido registrada en 58 países, entre ellos, EE. UU.
El componente fundamental de este invento es una banda elástica que se adapta a cada botella de plástico para compactarla y reducir hasta un 80 % su volumen.
Video BAKBUK: https://vimeo.com/337759890
De cara a la nueva generación del reciclaje, Ecoams Planet tiene previsto organizar próximamente, en colaboración con el Ministerio de Educación Nacional, visitas a las escuelas para presentar el invento a los niños. El enfoque pedagógico consiste en sensibilizar acerca del reciclaje al proponer un desafío cuyo objetivo es aplastar la mayor cantidad posible de botellas gracias a la banda elástica.
Maurice Amsellem comenta lo siguiente: «Si actuamos juntos, podremos dejar un planeta mejor para nuestros hijos».
De esta forma, el sistema, que ya se encuentra directamente en la botella durante la compra, permite a los consumidores aplastar cada una de las botellas con facilidad y reducir, por tanto, su volumen en un 80 %.
Así se logra ahorrar un espacio de almacenamiento considerable y dividir entre cinco la frecuencia de los desplazamientos al centro de reciclaje más cercano.
La banda elástica en la que se basa la patente presenta determinadas características: está especialmente diseñada para la industria alimentaria, se puede utilizar con todas las botellas de tereftalato de polietileno, es reciclable y cumple todas las normas aplicables.
Según Maurice Amsellem: «Bakbuk™ revoluciona el proceso de reciclaje a todos los niveles. En primer lugar, desde el punto de vista de los consumidores, es fácil de utilizar, resulta eficaz, divide entre cinco la cantidad de desplazamientos al punto de reciclaje y brinda una solución ecológica y realista al problema de la contaminación mundial ligada a los plásticos.
En segundo lugar, para las empresas de reciclaje, reduce la cantidad de viajes necesarios hasta las plantas de reciclaje y disminuye los gastos de transporte y compactación al aumentar la eficacia y la productividad generales.
Por último, ofrece a los fabricantes de bebidas una solución que les permite alcanzar sus objetivos en materia de desarrollo sostenible, ya que se trata de una solución procedente de la economía circular que apela a los consumidores».
El producto ya cuenta con el beneplácito de los consumidores de todo el mundo. Varios institutos de sondeos, como Ipsos, Nielsen y Geocartography, han llevado a cabo distintos estudios en los que se ha consultado a los consumidores de Estados Unidos, Alemania, Japón e Israel.
A la pregunta«¿Qué importancia considera que tiene este invento? », la gran mayoría de encuestados (el 78 % en Israel, el 91 % en Estados Unidos, el 63 % en Alemania y el 74 % en Japón) afirmó que, en su opinión, este invento posee una gran importancia.
En ese sentido, el 69 % de los encuestados en Estados Unidos está dispuesto a gastar hasta 2,5 céntimos de dólar más por una botella que cuente con la solución Bakbuk™.
La empresa especializada en sondeos KANTAR ha llevado a cabo un nuevo estudio en Noruega, un país líder en el mundo en lo relativo a estos desafíos, con un porcentaje de reciclaje de botellas del 97 %.
Incluso aquí, los resultados publicados la semana pasada indican que el 78 % de los encuestados consideran que se trata de un invento importante y que casi la mitad estarían dispuestos a pagar un suplemento por botella para utilizar este sistema, ya que, en su opinión, esto facilita en gran medida la transferencia de las botellas de plástico hasta el punto de recogida.
Así, este invento tiene como objetivo lograr hacer partícipes a todos los actores de la cadena de reciclaje. En primer lugar, a los fabricantes de bebidas, quienes soportan, con razón, enormes presiones con respecto a este tema tan actual, tal y como demuestra la campaña publicitaria de Coca-Cola presentada en Bélgica durante el verano de 2019, en la que se difundía el siguiente mensaje:
«Si no nos ayudas a reciclar, no compres Coca-Cola»
Este mensaje pone de manifiesto una intención y demuestra la grave ausencia de una solución inmediata.
De momento, la postura de los principales fabricantes de bebidas está lejos de estar a la altura de los desafíos actuales. En una reciente auditoría realizada por el movimiento Break Free From Plastic, se presentó a Coca-Cola, Nestlé y PepsiCo como los principales contaminantes de plásticos del mundo.
En su comunicado de prensa del 19 de enero de 2018, James Quincey, presidente y director general de The Coca-Cola Company, declaró lo siguiente:
«Coca-Cola se encuentra inmersa en un proceso de renovación total de su enfoque con respecto a los envases con el objetivo de contribuir a recoger y reciclar el equivalente al 100 % de sus envases en el año 2030 en todo el planeta. Todo el mundo se enfrenta a un gran problema con el embalaje y, al igual que las demás empresas, es nuestra responsabilidad contribuir a resolverlo».
A esta afirmación, Maurice Amsellem responde:
«Actualmente, Coca-Cola no tiene ninguna excusa para esperar hasta 2030 para tomar medidas. La solución no pasa por adoptar una estrategia de comunicación evasiva, como muestra la campaña belga de Coca-Cola («Si no nos ayudas a reciclar, no compres Coca-Cola») , ni por devolver la responsabilidad al consumidor.
Sin embargo, Coca-Cola no conocía la existencia de esta patente.
Este invento constituye una solución de reciclaje inteligente, sencilla y eficaz que puede contribuir a resolver los problemas inmediatos de reciclaje, así como los problemas a largo plazo relacionados con la contaminación del medio ambiente que agravan la catástrofe ecológica más grave en toda la historia de la humanidad.
Como señala James Quincey, esta vez con razón, ayudar a resolver este problema es algo que atañe a todos los fabricantes de botellas de plástico» .
Para obtener más información: https://www.ecoamsplanet.com/
Video sobre BAKBUK: https://youtu.be/iFWxvy-rKMw
Video sobre BAKBUK: https://vimeo.com/337759890
Photo - https://mma.prnewswire.com/media/1044503/Bakbuk_Recycling_Solution_1.jpg
Photo - https://mma.prnewswire.com/media/1044504/Bakbuk_Recycling_Solution_2.jpg
Logo - https://mma.prnewswire.com/media/1057678/Bakbuk_Recycling_Solution_Logo.jpg
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